A veces, tienes la necesidad de pasar unos minutos soñando con la persona que quieres…
A veces, quieres que siga todo así, tu alma pegada a mí, mientras la piel cumple, poco a poco, sus deseos…Mientras nos decimos al oído que lo nuestro siempre será eterno.
A veces, el silencio invade nuestros momentos mientras tus labios y los míos se rozan, mientras nuestros ojos mandan miradas compenetrantes que sólo nosotros podemos descifrar, mientras nuestros cuerpos se funden en uno solo…
Sólo existimos nosotros en esa habitación, solos tú y yo, sin que haya nadie que nos diga lo que tenemos que hacer o decir, sin que haya un reloj nos cuente las caricias y los besos que nos vamos dando.
Es en ese momento cuando me encantaría poder parar el tiempo a nuestro alrededor, y que ese tiempo se haga eterno, porque a veces, tengo miedo cuando te veo caminar, y poco a poco, te vas alejando de mí, de que descubras que… que muero por tenerte a mi lado, que muero por esos besos, por esas miradas, por esos sueños que hemos soñado juntos…en definitiva, que muero por ti.
Apaga la luz, acércate, y bésame otra vez.
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